Pensamientos y emociones
A algunas familias les preocupa que nadie más pueda entender la situación que atraviesan. Otras personas no saben bien cómo platicar acerca de todo lo sucedido. A continuación, tenemos algunos ejemplos que nos muestran cómo las familias manejan estas emociones.
A continuación puede escuchar dos experiencias familiares diferentes.
Elijah: Amani tiene un tanque de oxígeno portátil; por eso, tengo que calcular bien cuánto tiempo paso haciendo mandados. Planifico con anticipación y llevo un tanque extra en caso de que nos quedemos atascados en el tráfico o esperemos más tiempo de lo usual en la oficina del doctor.
Esta situación solía ponerme ansioso, pero he aprendido a adaptarme.
A veces me siento solo, porque no conozco a otras personas que estén pasando por algo similar. Y algunos días, siento que no tengo tiempo para mí mismo.
Empecé a ver a un terapeuta y eso ha ayudado. Salir a caminar cuando el clima está bonito y mi hermana la cuida... eso también ayuda.
Jane: No quería hablar mucho de ello, porque sentía que nadie más sabía por lo que estaba pasando.
Pero después encontré en Facebook grupos de mamás que habían pasado por cosas similares y realmente me ayudó hablar con personas que conocían la situación que estaba atravesando. Aunque no he conocido a ninguna de ellas, porque viven muy lejos, siento que tenemos un vínculo especial.
Con el tiempo, dolió un poquito menos, pero nunca se fue por completo. No creo que eso ocurra nunca.
A veces me pongo triste de la nada. Luego, me recuerdo que hice lo que sentí correcto para Grace y eso me ayuda un poco.
Grace me convirtió en mamá y estoy tan agradecida por ello. Incluso a pesar de los momentos difíciles, ella me convirtió en una mejor persona, y me fortaleció, y eso lo llevaré siempre conmigo.